El fundador de Bodog ha sido acusado por la justicia de los Estados Unidos, tras la confiscación esta semana de su dominio principal, Bodog.com. Los cargos que se le imputan son operar un negocio de juego ilegal y conspirar para cometer lavado de dinero. La acusación señala que Ayre trabaja junto a James Philip, David Ferguson y Derrick Maloney para conducir un negocio de juego ilegal desde Junio de 2005 a Enero de 2012.
Los cargos y la acusación se centran en el movimiento de fondos en territorios internacionales, que van desde Suecia e Inglaterra a Malta y Canadá. A su vez, son acusados de contratar revendedores de medios y publicistas para promover el juego online.
Bodog Entertainment Group es acusado de trabajar con procesadores de pagos situados tanto dentro de los Estados Unidos como fuera del país. En la acusación se nombra a JBL Services, que procesó más de 43 millones de Dólares y ZipPayments, que procesó más de 57 millones de Dólares para la compañía.
Según informa Baltimore Sun, un ex empleado de Bodog habría ayudado en la investigación, identificando a los oficiales y directores de la empresa y dando información sobre las operaciones de Bodog en Canadá y Costa Rica.
Calvin Ayre comentó sobre la acusación en su contra y dijo: “veo esto como el abuso del sistema de justicia penal de USA para el beneficio comercial de las grandes corporaciones de Estados Unidos. Está claro que la industria del juego online es legal según el derecho internacional y en el caso de estos documentos también está claro que el imperio de la ley no se le permitió frenar una carrera para tratar de ganar la guerra de la opinión pública “.
