Finalmente, Ladbrokes se ha convertido en el último operador en abandonar sus operaciones en el Reino Unido, luego de que las presiones de compañías de gambling instaladas offshore fuesen demasiado competitivas. La compañía confirmó que trasladará su centro de apuestas deportivas online a Gibraltar para finales de año, siguiendo los pasos de su competidora William Hill.
Actualmente, las operaciones de recepción de apuestas deportivas de Ladbrokes están instaladas en el Reino Unido, y pagan un 15% de impuestos sobre sus ingresos totales, además de un 15% de impuesto al valor agregado y el impuesto a las corporaciones. Los operadores de apuestas también deben pagar el impuesto a las apuestas hípicas de un 10% del total ingresado por este concepto.
En contraposición a la situación en Gran Bretaña, los operadores con licencias offshore pagan porcentajes impositivos de un 1% o 2% de sus ingresos, y no están sujetos a los impuestos sobre apuestas hípicas.
Christopher Bell, CEO de Ladbrokes, comentó esta semana: “nuestro galardonado catálogo de apuestas deportivas es el más grande en el Reino Unido pero enfrenta una competencia agresiva de parte de operadores offshore que gozan de grandes ventajas en costos debido a los bajos impuestos de esas jurisdicciones”.
En 2008, Ladbrokes.com registró unos 725,000 clientes activos, facturando 172.2 millones de Libras e ingresando 55 millones. Sin embargo, los niveles de crecimiento en 2009 se enlentecieron a causa de la recesión económica y por la creciente competencia de otros operadores. En el primer semestre de este año, las ganancias por apuestas deportivas de Ladbrokes disminuyeron un 5% a 30.5 millones de Libras.
Cabe destacar que si bien las operaciones de apuestas deportivas de la compañía se trasladarán a Gibraltar, su servicio de call center permanecerá en el Reino Unido. Ladbrokes realizará además otros cambios con el fin de reducir costos, incluyendo el uso de nuevas tecnologías y el movimiento de personal.
